Viajamos hasta la isla vecina para seguir allí con las labores de limpieza de esta campaña. El caso de Formentera es bastante especial. A pesar de ser un espacio protegido y donde, podríamos pensar, que el turismo respeta más el medio, el litoral está bastante afectado por contaminación de residuos en algunos puntos negros que ya identificamos el año pasado.
¿Por qué pasa esto? Porque es la isla más meridional de las Baleares y la más próxima a las costas de Argelia, por lo que recibe mayor contaminación por plásticos arrastrados por corrientes marinas y micro-plásticos, con gran diferencia con respecto al resto de islas.
Y es que estimamos que cerca del 90% del total de los residuos retirados en el litoral de Formentera han llegado arrastrados por las corrientes marinas, mientras que el 10% restante ha sido generado tierra dentro.
De ahí que sea tan importante la labor de concienciación y colaboración real y efectiva entre los diferentes países. En Argelia, por desgracia, la gestión de los residuos es prácticamente inexistente y siguen utilizando lechos de torrentes y zonas acantiladas como vertederos, que después, van a dar al mar.
No en vano, en la campaña pasada y solo en Formentera, se recogieron casi 20 toneladas de residuos.
De aquí la importancia de poner foco también en esta isla y en sus puntos negros. Este año trabajaremos en una primera etapa pasando por Caló des Mort, Migjorn, Punta des Corb Marí y Cala Saona.
En breve volveremos para una segunda etapa, pero necesitamos fondos para poder llevalo a cabo. Si quieres ayudarnos a conseguirlo puedes donar aquí.